La información del barco nos decía que a eso de las 6:00 saldríamos del Canal Storebelt y entraríamos en el Mar Kattegat (entre Suecia y Juttland, península danesa) y que estaríamos a 15 millas náuticas de la costa... pues vale.
Después de un día de navegación casi todo el tiempo por el mar del Norte, bastante aburrido por cierto, en el que no ves mas que agua y el airecillo que corre no es cálido precisamente llegas a las 11 de la mañana a Bergen habiendo recorrido 615 milla náuticas.
En esta ocasión no escogimos
ninguna excursión, y parece ser que
acertamos al menos no escogiendo la que duraba 2,30 horas, ya que según nos dijeron no merecía
la pena... 55,90 euros. Había otras excursiones
panorámicas en bus
pero...
Bergen es una ciudad fundada en 1070, siendo hasta principios del
SXIX una de las mas grandes del país ya que se trata de un puerto comercial y naval de relevancia. Se
puede tomar el funicular Floibanen y
subir al monte Floyen desde donde se divisa toda la ciudad y alrededores, pero
hay que andar listo ya que habitualmente hay unas colas importantes.
La idea era conocer el Mercado del Pescado (Fisketorget).
Nada mas acceder al mercado nos sorprendió que en casi todos los puestos de venta de productos del mar hubiera
alguien que hablaba español. Encontramos de
diferentes nacionalidades, y por supuesto españoles.
Empezamos degustando salchichón... de reno, de alce y de ballena. Bueno, tampoco es que te
dieran una buena raja para probar, pero lo suficiente para hacerte una ligerísima idea..., en principio la idea era poder comprar, a pesar del
precio, alguno de esos productos... esa era la idea, que después cambiamos.
Después de caminar y
degustar en algunos sitios y comprobar que aun siendo el mismo producto el
sabor es distinto, cosa lógica, me puse a
sacar una foto al famoso Cangrejo Real, una especie que he visto muchas veces
en los documentales del canal Odisea, un bicho bastante feo pero ... que tiene
un sabor excelente y un precio igual... de alto, y en ese mismo puesto había un español, catalán para mas señas, que entabló conversación con nosotros y
echó por tierra la fama de tacaños de los catalanes, nos proporcionó degustación de todos los
productos, tanto cárnicos como de
frutos del mar y sus "muestras" fueron más generosas que las de puestos anteriores...
Probamos distintos marinados, tanto de salmón salvaje como del otro, y nos dio precios..., el kilo de salmón salvaje estaba a 90 euros si comprabas solamente un kilo, si
comprabas media pieza, unos tres kilos, el precio se rebajaba a 80 euros. Eso
si, te lo envasaban y te lo ponían
listo para llevar sin ningún problema...
aguanta de 7 a
10 días.
Decidimos, en agradecimiento a su atención comer en el restaurante del punto de venta, Restaurante y tienda
Fjellskal (unas mesas corridas). Ya desde España teníamos claro lo que íbamos a comer... bacalao, salmón y ballena.
2 comentarios:
Pues yo no me como la ballena esa ni regalada... :(
Eso si, la entrada es preciosa, felicidades :)
Salud
Menudo viajecito os habéis dado. Ahora mismo estamos hablando en casa de vosotros, nos acordamos de cuando vinisteis aquí...por cierto, dice Miguel que tenéis la casa disponible para cuando queráis volver, pero si no quieres pasar calor mejor que no sea este mes....jajajajaja.
Besos
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