Nunca me
había parado a mirar detenidamente
los hórreos, bueno, si, pero
desconocía alguna de sus
peculiaridades.
Sabía, por ejemplo que los hay de tres tipos (al menos los
gallegos), de piedra, de ladrillo y de madera, en función de las posibilidades de sus dueños.
Sabía también que se destinaban a usos
diversos como almacén de grano, secadero de
pescado,...etc., de ahí las rendijas que tienen en
los costados
Las
"patas" alejaban la humedad de lo almacenado pero nunca me había puesto a pensar en los roedores... que ascenderían por las mismas para comer...
En uno de
mis últimos viajes, a Galicia, la
guía nos detalló algunas de las peculiaridades de los hórreos, que después pude comprobar que algunas
de ellas coincidían con los asturianos.
La unión entre las “patas” y la edificación propiamente dicha viene
diferenciada por unos discos de piedra con el fin de que los “roedores-alpinistas” que ascendiesen por la pata
se encontrasen con una “pared” para poder acceder a lo almacenado, pero una pared
horizontal, con lo cual deberían salvarla poniendose tripa
hacia arriba, y sus uñas no le servirian para evitar
este obstáculo.
Otra de
las características sería la cúspide de los mismos, la
coronación en los hórreos gallegos viene dada por una cruz y un simbolo (fálico en casi todos), por una parte representarian a la
religión y por la otra a la
fertilidad.
1 comentario:
Donde estén los asturianos...jajaja
Salud
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